Las baterías de iones de litio presentan importantes peligros de incendio y explosión. Las baterías dañadas pueden, bajo ciertas circunstancias, incendiarse espontáneamente o volverse inestables y explotar cuando se calientan. Según el ADR, las baterías de iones de litio están claramente clasificadas como mercancías peligrosas y deben ser tratadas en consecuencia.